Los mercados de renta variable subieron este mes sustancialmente en EEUU, más de un 2,5% tanto el S&P500 como el Nasdaq. Europa se mantuvo sin cambios y Japón cayó un 1%. La renta fija subió, en términos generales, en todas sus clases, exceptuando los gobiernos europeos, que retrocedieron un 0,25% ante la incertidumbre de mayores subidas de tipos de interés en la Eurozona.
Como esperado ampliamente por los inversores, ambos bancos centrales, la FED y el BCE, subieron 25 pbs. los tipos de interés en el mes de julio. Prácticamente todo el mercado considera que estamos llegando al final del ciclo de subidas de tipos de interés. En todo caso, las dudas se ciernen sobre Europa, dada que la situación todavía es algo precaria. Las políticas económicas a futuro van a depender en ambos casos de la evolución del crecimiento económico y de la inflación pero, mientras que en EEUU el crecimiento económico está en un sólido 2% y la inflación ha caído de forma bastante sostenible, en Europa la situación es diferente, su economía apenas refleja crecimiento y, aunque la inflación también está empezando a bajar, la subyacente y la de servicios se muestran obstinadamente altas.
El USD ha cerrado de nuevo con pérdidas, con una caída del 2% en el mes, y el oro recupera con fuerza un 3%, que deja el año en una subida del 8,5%.
En las carteras, seguimos incrementando el peso en la renta fija corporativa con algo más de duración, con la expectativa de que estemos llegando al fin del ciclo de subidas de tipos de interés en EEUU, y no muy lejos del de la eurozona. En cuanto a la renta variable, preferimos la de EEUU, aunque consideramos que las valoraciones están elevadas y los mercados deberían recortar en algún momento.