A principio de agosto los mercados de renta variable sufrieron una brusca corrección tras los datos más débiles de lo esperado en EEUU, hasta el punto de que el índice VIX, que recoge la volatilidad del mercado, dobló esos días. Este movimiento se regularizó a mediados de mes, volviendo a rebotar los mercados y a normalizarse los niveles del VIX, al alejar los inversores la posibilidad de una caída fuerte del crecimiento. La renta variable, tras estos movimientos acabó subiendo con fuerza en EEUU, 2,25% y un 1,75% en Europa, mientras que Japón retrocedió 1,16% y China un 3,5% en el mes.
Los datos de PMI en USA, UK y Japón reflejaron unos datos positivos, mientras que los números de la zona Euros fueron más débiles, particularmente en Alemania. A principio de septiembre salieron datos de PIB de EEUU del último trimestre, con un crecimiento del 3%, mientras que Europa Occidental fue de un 1,3%. La Fed se ha focalizado en la inflación hasta ahora, pero su presidente Powell manifestó el cambio hacia priorizar el empleo en su última conferencia en Jackson Hole. Los ingresos de las empresas tampoco parecen afectados por la ligera ralentización de la economía global y se mantienen hasta la fecha bastante fuertes.
En cuanto a la renta fija, los bonos gubernamentales en EEUU subieron un 1,34% ante el incipiente cambio de sesgo de la política económica. El mes de agosto terminó siendo un buen mes para los activos más arriesgados de renta fija. Igual que en la renta variable, el inicio del mes los precios de los bonos cayeron ante los datos débiles macroeconómicos, sin embargo las rentabilidades disminuyeron fuertemente a medida de que los inversores empezaron a preciar más caídas de tipos de interés en los próximos meses. Finalmente, los bonos corporativos de EEUU subieron un 1,57% y los bonos de alto rendimiento americanos un 1,63%. En Europa, las subidas fueron más moderadas, al ser los datos económicos mucho más débiles e inciertos. Los corporativos europeos recuperaron un 0,30% y los gubernamentales un 0,36%, mientras que los bonos de alto rendimiento europeos subieron un 1,26%.
El USD cayó un 2% en el mes, de forma que está plano en el año contra el Euro, mientras el oro recuperó un 2,28% y ya acumula un 21,35% en el año.